Estos dos mecanismos son parte de las acciones que  los desarrolladores y las proptech inmobiliarias están impulsando actualmente para facilitar la adquisición de bienes inmuebles en las grandes ciudades

Por: Sergio Rojas Coello

Comprar una casa es uno de los eventos más importantes en la vida de cualquier persona. Por un lado, representa un gran aporte a nuestro patrimonio y una buena inversión; por otro, brinda esa sensación de logro, de tener un respaldo ante turbulencias económicas, como un legado que construimos para nuestros hijos.

Durante mucho tiempo creció la percepción de que comprar una casa céntrica dentro de una gran urbe como la CDMX era algo sólo para millonarios, que el resto deberíamos tomar opciones en la periferia en zonas no tan atractivas o incluso mudarnos de ciudad. Esto ha sido un tema global, no es exclusivo de las ciudades latinoamericanas y tiene muchas aristas. Sin embargo, en los últimos meses hemos visto una tendencia que impactará de forma irreversible la forma en que compramos vivienda nueva: acceso a preventa temprana con un enfoque total en beneficios para el comprador.

En los últimos meses he tenido la oportunidad de conocer desarrolladores que están aplicando soluciones creativas a los retos que nos ha dejado un año muy complicado. En el caso de la construcción, muchas obras pararon y tuvieron que ser replanteadas, pero como en toda crisis, siempre hay oportunidades, por lo que empezamos a ver cambios para bien en el sector de bienes raíces.

El mercado inmobiliario en la Ciudad de México tiene un envidiable auge al colocar 33 mil unidades de vivienda nueva cada año. De acuerdo con la Encuesta Nacional de Ingreso y Gastos de los Hogares, el 75 por ciento de los inmuebles se compran a través de un crédito hipotecario. Otro dato revelador es que el 40 por ciento de los mexicanos adquieren su primer hogar cuando tienen entre 26 y 30 años de edad. Interés y compradores existen. ¿Cómo podemos ampliar el acceso?

Preventas y tecnología digital

Por un lado, sabemos que tres cuartas partes de los interesados en adquirir un inmueble no tienen los recursos suficientes para hacerlo en una sola exhibición; por otro, el costo de un inmueble que está listo para ser habitado es superior al de uno que comenzará a construirse. La preventa es un mecanismo fundamental para darle flujo a un desarrollo, así como una oportunidad para dar acceso a mejores condiciones y mejores costos a un mayor número de personas.

“La preventa es un mecanismo fundamental para darle flujo a un desarrollo inmobiliario, así como una oportunidad para dar acceso a mejores precios a un mayor número de personas”.

 

Hoy, gracias a la combinación de alianzas estratégicas y tecnología, se está logrando que más personas puedan hacerse de un departamento nuevo. Lo anterior con el acceso a opciones cuando el precio aún es bajo y precios que antes estaban reservados para la lista friends & family, y con condiciones que permiten diferir el pago del enganche y llegar así a una mejor posición cuando se requiera el crédito hipotecario.

Es en esta intersección donde está una gran oportunidad. En La Haus, por ejemplo, estamos usando nuestra tecnología, conocimiento y enfoque en el usuario para apoyar a que una persona encuentre esa casa que se adapte a sus necesidades y presupuesto, con oportunidades que antes parecían impensables y con iniciativas que son construidas alrededor del comprador y permiten tener una base de inversionistas inmobiliarios muy robusta como Prime o La Haus Exclusives. Combinado con tecnología, lo anterior posibilita que los desarrolladores puedan cambiar la forma en la que colocan sus desarrollos. Estamos seguros que la industria seguirá sumando innovación y flexibilidad.

El futuro es prometedor. Si las proptech trabajamos de la mano con desarrolladores, vendrán cosas que permitirán a los compradores encontrar grandes oportunidades. Es un círculo virtuoso.

Los primeros casos de éxito ya saltan a la vista. Un ejemplo es Arquitectoma, que lanzó su proyecto Máxica, en la colonia San Rafael, con 190 unidades, que gracias a un enfoque en el comprador y a un trabajo de ciencia de datos muy bien calibrado se logró colocar el 40 por ciento del proyecto en unas cuantas semanas, 80 por ciento menos del tiempo esperado. Otro caso es Salamanca 11, un proyecto de M2 en la colonia Roma Norte, en el que se logró vender el 18 por ciento de las unidades asignadas el día del lanzamiento.

Esto es resultado de combinar varios factores, de un trabajo en sincronía entre desarrollador y tecnología, siempre con el usuario en el centro. Juntos podemos impulsar nuestra industria, pues  veo un camino claro: ajustar las obras a intereses de públicos concretos y bien identificados, trabajar en crear una oferta y condiciones atractivas, construir beneficios para el comprador y usar la tecnología de datos para hacer campañas bien dirigidas y enfocadas en los usuarios correctos. Hoy, tenemos la responsabilidad de alimentar este círculo virtuoso y lograr que más gente pueda acceder a vivienda nueva de calidad.

 

Sergio Rojas Coello

Country manager de La Haus México de día y DJ de noche. Graduado en Ingeniería en Negocios por el ITAM, con un MBA por la Universidad de California de  Berkley. Busca transformar la industria inmobiliaria con un equipo ganador+tech.

@LaHausCom

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