La actual administración en el Gobierno Federal, a través de la Secretaría de Hacienda y Crédito Público (SHCP), impulsa la preconstrucción digital BIM (Builiding Information Modeling) tecnología con la que se busca unificar las obras públicas, eficientar los procesos y favorecer la transparencia en costos.

Durante 2020, la fase de preparación del gremio hacia esta forma de trabajo será clave para acceder a proyectos públicos, por lo que los especialistas en plataformas BIM tendrán el reto de llevar a la industria a “la digitalización” y cambio de pensamiento al momento de diseñar e implementar diferentes obras. Para 2022 todos los proyectos de obra pública deberán comenzar a implementar plataformas BIM en su flujo de trabajo.

La integración de esta plataforma ya es a nivel mundial, siendo Inglaterra su principal exponente mientras que en América Latina, Chile y Brasil están implementando medidas concretas para que la metodología BIM sea obligatoria en las fases de desarrollo del proyecto, ejecución de obras y mantenimiento de edificios.

Empresas como Graphisoft han sido clave en la implementación BIM de los mercados latinoamericanos, razón por la cual la compañía se perfila como un aliado clave para los esfuerzos de implementación que realiza ahora el Gobierno Federal.

Gustavo Carezzato, director general de Sudamérica y director interino para México de Grsphisoft, señaló que “integrar una plataforma BIM como Archicad en el flujo de trabajo a través de la preconstrucción digital permite reducir hasta 40% los tiempos de entrega y 30% del costo total de la obra. Durante el primer trimestre de 2019, la industria de la construcción representó el 7.6% del PIB según INEGI, siendo un sector clave para la economía de México, de ahí que la implementación de BIM es una necesidad latente”.

Una encuesta realizada por la Fundación de la Industria de la Construcción en 2017 indica que solo el 42% de las empresas del sector usan BIM y saben cómo aplicarlo, aunque algo interesante es que el 47% de ellas respondió que el uso de BIM será mayor o mucho mayor al actual en los próximos años. Esta situación representa un reto muy grande en la formación y capacitación de especialistas que puedan edificar bajo este flujo de trabajo.

2020 será un año fundamental en el proceso de preparación ya que es la última fase de adaptación de y preparación de la estrategia la cual será obligatoria a partir de 2026 por lo que aquellos arquitectos, ingenieros y/o constructores que no se encuentren preparados en el uso de estas tecnologías no tendrán oportunidad de acceder a los proyectos de gobierno.

El resultado de la integración obligatoria de BIM en el repunte de la industria se podrá medir una vez que arranque la fase de aplicación de la norma en 2022 y hasta 2026, por lo que las alianzas que la SHCP tenga con los principales desarrolladores de plataformas BIM como Graphisoft serán claves para crear una cultura de eficiencia que va más allá del diseño de un plano o la proyección en 2D de una obra en curso.

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