“La sostenibilidad arquitectónica radical debe ser una de las claves de la era poscoronavirus”: Pablo Muñoz, cofundador y CEO de Espacios Evalore

Se ha escrito mucho durante las últimas semanas acerca de la oportunidad de cambio que nace del seno de una crisis. Las esperanzas se centran en una modificación de los patrones actuales que nos preparará para una próxima pandemia. Pero ¿por qué no aprovechar la coyuntura para realizar cambios estructurales que nos lleven a una mejora global a largo plazo? Este proceso habría de llevarse a cabo en todos los ámbitos de nuestra sociedad. Centraré mi reflexión sobre el ámbito de la arquitectura por ser el que me toca más de cerca.

Si hay un factor que va a entrar con fuerza en la compleja ecuación de nuestros proyectos arquitectónicos es el sanitario. El contexto actual de pandemia global parece por fin haber levantado conciencias acerca del impacto del entorno construido sobre nuestra salud. Una arquitectura consciente tiene la capacidad, no sólo de atender a cuestiones fundamentales de salud que han sido ignoradas en las últimas décadas, sino de introducir herramientas para luchar activamente contra la propagación de enfermedades. A las más comunes estrategias orientadas hacia la mejora de la calidad del aire, de la iluminación o de nuestra percepción del entorno, habrá que sumar la utilización de acabados y mobiliario antimicrobianos, la inclusión de tecnologías para identificar a usuarios contaminados e incluso para eliminar las partículas con virus del aire.

Ahora que, si queremos actuar sobre la raíz del problema debemos primero reconocer el impacto global de la arquitectura sobre el medioambiente. No en vano, nuestros edificios son responsables del 40 por ciento de las emisiones de carbono, aproximadamente. Continuar ignorando el impacto ambiental de nuestras construcciones ya no es una opción. La crisis actual ha dejado patente que modificar los patrones naturales puede tener efectos devastadores. La sostenibilidad arquitectónica radical debe ser una de las claves de la era poscoronavirus: edificios de consumo nulo o generadores de energía, análisis de ciclo de vida en todos los materiales utilizados y mimetización con el entorno natural han de ser conceptos imprescindibles.

Al igual que en la arquitectura, los cambios en la sociedad poscrisis vendrán con un fuerte componente de salud. Si bien, esto no basta. No debemos olvidar que es la mano del hombre sobre la naturaleza la causante de la mayoría de las crisis globales. La responsabilidad ambiental ha de dominar los esfuerzos del cambio. De no ser así, será la propia naturaleza con toda su fuerza la que llame de nuevo a nuestra puerta.

Pablo Muñoz
Cofundador y CEO de Espacios Evalore.

Arquitecto y consultor en sostenibilidad y salud en el sector de la construcción. Cursó estudios de arquitectura en la Universidad de Valladolid, España. Realizó una maestría en Sostenibilidad en la Universidad de la Ciudad de Nueva York (CCNY) y trabajó como consultor en eficiencia energética para Steven Winter Associates.

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