El proyecto Isla Urbana y la inmobiliaria Quiero Casa organizaron el foro “Agua en la CDMX: Oportunidades para el Desarrollo Inmobiliario Sostenible”, donde manifestaron la preocupación por el desabasto de agua que existe en la Ciudad de México (CDMX). Y expusieron algunas soluciones viables y rentables para dicha problemática.
Durante el evento, se destacó el programa “Cosecha de lluvia”, el cual tiene como propósito dar acceso a las familias mexicanas para mejorar su calidad de vida, a través de la colocación de sistemas de captación pluvial.
“La implementación de estos sistemas tiene un costo de 18 mil pesos y sólo se colocarán en viviendas de zonas que sufren escasez. En la actualidad el 60 por ciento de los inmuebles tienen cisternas y el 95 por ciento tinacos”, afirmó Enrique Lomnitz, cofundador del proyecto Isla Urbana.
En este sexenio se tiene planeado instalar 100 mil sistemas de captación de lluvia en la CDMX. Tan sólo este año la meta es que 10 mil viviendas ya cuenten con dicha estrategia pluvial, hasta el momento se han instalado 5 mil trecientos.
David Hoffs, director de Estrategia Corporativa de la desarrolladora Quiero Casa, afirmó que debido al bajo costo que se paga por el servicio de agua, los habitantes de la CDMX han perdido conciencia sobre cuidar el agua. “Uno de los panoramas sería que las autoridades consideraran dejar de subsidiar a los ciudadanos que sobrepasen cierto consumo, así la población tendría un incentivo para ahorrar el líquido vital”, dijo.
Al evento también acudió el doctor Alfonso Espitia Cabrera, investigador de la Universidad Autónoma Metropolitana, quien habló sobre la implementación del sistema de tratamiento por oxidación avanzada que promueve junto con el Centro de Investigación sobre Biodigestión, Residuos Urbanos, Agua, Composta y Energía Verde (CIBRUC). Dicha tecnología elimina contaminantes refractarios, logrando la disminución de la toxicidad de los afluentes.
El especialista señaló que, mediante la implementación de este sistema de captación en las nuevas construcciones de centros comerciales o edificios de usos mixtos, representaría un bajo costo de implementación.
“El reto era encontrar la tecnología para hacer este proyecto, buscar a los proveedores y por último aliados. Ahora la tarea es hacer propuestas concretas viables”, concluyó Hoffs.